domingo, 21 de noviembre de 2010

Te quiero. 

Es simple. Fácil de decir, de escribir, de deletrear. Y, en este momento, es lo más difícil de escuchar que puedo imaginar. 

Porque, a veces, escuchar dos palabras hace que te rompas por dentro y te retuerzas de dolor. Dos palabras pueden hacerte perder el rumbo, el equilibrio y hasta la razón. 

Lo difícil es oír a tu corazón gritar a voces un " te quiero " y apretar los labios para que no se escape, para que mis dos palabras no me hagan tanto daño como lo están haciendo las tuyas. 



 
"Mon coeur a ses raisons, mon amour, de ne t'appeller par chèri... Toi, tu vois que je t'aime... Je ne veux pas souffrir..."

domingo, 7 de noviembre de 2010

sold heart.

He buscado en tu mirada el rincón que me guardabas para que escapara; las flores cuidadas que me dejabas para hacerme sonreír nada más llegar; mi montón de cojines sobre el sofá; la mantita que me daba calor en los días más frios y mi cuaderno de lamentos sobre la mesa, justo al lado del café. 

He buscado sin cesar la puerta para entrar, y la puerta ya no está. Quiero, necesito, escribir mil páginas más en ese cuaderno. Vivo anhelando volver a mi rincón y desahogar todo lo que llevo abrumando en mi interior. 
Dibújame el mapa de tu mente, ponme un cartel en la entrada, una señal precisa y clara que me ayude a volver... ábreme una ventana si lo prefieres o hazme un hueco en la pared, simplemente ayúdame a regresar...

lunes, 1 de noviembre de 2010

No.

Que no, que no quiero tus palabras. No quiero tus promesas ni esas sonrisas que intentas pintar en mi cara. No lo hagas, no valdrá de nada. 

Porque, a veces, lo más duro es reconocer que has perdido y que, sólo con el más grande de los esfuerzos, podrás recuperar a la persona que amas. O, lo que es más importante, la que te ama. 


No voy a sentarme a esperar...